Hacía tiempo que no hacía ningún tipo de empanada y en el congelador tenía una lámina de hojaldre así que dije... "te ha tocado!!!" jejejejeje Me apetecía hacer algo con pechuga de pollo pero no lo "habitual" (lo pongo entre comillas porque normalmente no suelo repetir las mismas recetas, siempre hago cosas diferentes y si alguna vez repito alguna seguro que le doy algún toque diferente al de antes).
Así que dije... bueno... a ver lo que tengo por casa... miré la despensa, mi rinconcito de especias, la nevera... y dije... "Ya está!!! Vamos a hacer otro de mis inventos!!!" :-)
Ingredientes:
- Pechuga de pollo
- Una lámina de hojaldre
- Champiñones
- Pimiento verde
- Cebolla
- Puerro
- Jengibre
- Yogur
- Pimienta negra
- Mostaza en polvo
- Tomillo
- Albahaca
- 1 yema
- Sésamo
- Para la salsa:
- Cebolla morada
- Champiñones
- Nata para cocinar
- Queso grana-padano para rallar
- Nuez moscada
- Pimienta negra
Antes que nada, había que marinar la pechuga de pollo para que cogiera el sabor de todos los ingredientes del marinado. Así que corté la pechuga de pollo a dados, le puse tomillo, albahaca, pimienta negra y un yogur natural. Lo dejé en la nevera durante dos horas para que todos los ingredientes se mezclasen bien y cogieran bien los sabores de todo en conjunto.
Cuando ya está marinado, se sofríe la cebolla, el pimiento verde, el pollo marinado, el puerro y los champiñones. No lo tenemos que cocinar demasiado ya que luego en el horno va a estar un buen rato y allí se terminará de cocinar.
La salsa la podemos ir haciendo mientras la empanada está en el horno. Así que... extendemos la lámina de hojaldre y la partimos en dos. Si queréis una empanada más grande pues se cogen dos láminas de hojaldre, claro, pero yo esta vez la quería más bien pequeña. La pinchamos con un tenedor para que no hinche demasiado. Ponemos el relleno bastante extendido para que no quede todo en el centro y quede bastante repartido. La tapamos, la cerramos haciendo un borde (hay mil formas de cerrar una masa, se pueden hace distintos tipos de bordes o bien se cierra apretando con el dedo o con un tenedor, eso al gusto de cada uno) y la pintamos con una yema de huevo; le ponemos un poco de sésamo por encima para decorar. Y al horno a 200ºC hasta que esté bien doradita y veamos que la masa está bien hecha. En mi horno suele tardar unos 30-40 minutos, depende del horno que tengáis.
Para la salsa, he usado la misma sarten en la que he cocinado el relleno. Como ha quedado un poco de salsa del marinado, la he usado para la salsa de acompañamiento a la empanada. Ahí sofreímos la cebolla y los champiñones; cuando esté casi hecho, le agregamos la pimienta negra, la nuez moscada, la nata y el queso rallado; lo cocinamos un poco más y lo pasamos a un recipiente para triturarlo. A mí la salsa se me quedó bastante fina, si hubiese quedado con trocitos, en este caso lo hubiera colado porque quería una salsa fina sin tropezones, pero si os gustan, pues ningún problema, claro está!!! :-)
Y listo ya todo!!! Tenemos la empanada bien caliente, la salsa lista y solo queda emplatar!!!! La verdad que el relleno de la pechuga de pollo marinada quedó muy buena y la salsa de champiñones quedó muy suave y ligera con un agradable sabor. Desde luego que receta recomendada, tanto por la empanada como por la salsa de acompañamiento!!!
A ver si os gusta porque a nosotros nos ha encantado!!! :-)